martes, 10 de marzo de 2009

Guerra de movimientos


Hasta el comienzo de la guerra, los generales, que habían estudiado las guerras napoleónicas, pensaban que la guerra sería corta. Pero los líderes militares de ambas potencias estaban equivocados en su planteamiento. Ellos habían concebido el enfrentamiento basandose en el uso de la infantería. Pero tras la Revolución Industrial, las fortificaciones militares habían sido reforzadas, en respuesta al avance del armamento. La infantería nunca podría desequilibrar los frentes.

Al comienzo de la contienda, ambos bandos buscaron una victoria rápida. Francia desarrollo el plan XVII, mediante el cual agrupó la mayoría de sus tropas entre Nancy y Belfort, en la frotera de Alemania, previendo un ataque a través de Lorena. Los alemanes, por su parte, no situaron ni la mitad de su ejército en la frontera con Francia. Mediante el Plan Schlieffen, buscaban entrar en Francia por el este, a través de Bélgica, y empujar al enemigo hacia Suiza.

Las tropas alemanas derrotaron a los franceses en Charleroi y en Maubegné, mientras que las armas automáticas del frente alemán, junto al repliege prematuro de las tropas francesas, hicieron fracasar el Plan XVII. En apenas unas semanas, los alemanes ya estaban en la orilla del Marne, donde fueron frenados por los ingleses, que habían entrado en la guerra tras el paso de los germanos por Bélgica. Tras esta derrota, el Plan Schlieffen fue rápidamente dejado de lado, cambiando por completo la concepción de la guerra hasta el momento.

Pronto, los efectivos belgas restantes, y un mayor número de soldados ingleses entraron en la contienda, que a partir del momento se desarrollaría en Flandes.

Sn embargo, la estrategia germana si que funcianaría con Rusia. A pesar de que el ejército zarista contaba con kmas de ocho millones de hombres, la mayoría no eran más que campesinos sin ningún tipo de formación militar, mal armados. Ambos ejércitos, ruso y alemán, se enfrentaron en Tannenberg y, despues, en los Lagos Masurianos. En ambos casos, el ejército ruso fue derrotado.

En 1915, ambos bandos tuvieron nuevas incorporaciones. Italia se incorporó a los aliados, mientras que Bulgaria se unió a los imperios centrales, lo que equilibró la balanza del lado de estos en la invasión de Serbia.